La defensa antimisil no es algo muy complicado y se basa en cegar y/o confundir al sistema de guiado. Lo difícil es unirlas en un sólo sistema que detecte pronto y correctamente la amenaza, evalúe contramedidas y maniobras y presente toda esta información al piloto o la tripulación de una forma rápida, clara y consumiendo el menor tiempo posible; porque el tiempo en un factor básico en la defensa antimisil.
Los aparatos militares se modernizan casi constantemente y la evolución de las defensas ya no se mide en generaciones sino en años.
De esta forma entre las contramedidas más habituales están:
-Bengalas: son de una material inflamable que las hace arder al abandonar la aeronave y permanecen ardiendo durante varios segundos e incluso minutos
-Emisores infrarrojos: son fuentes de rayos infrarrojos sustitutivos de las bengalas donde estas no se pueden utilizar, como en ciudades y núcleos poblados
-Detectores laser: sirven para detectar posibles misiles que se acerquen
-Chaff: son emisores de señales electromagnéticas que despistan a los radares
-Sistemas perturbadores: equipos integrados en el aparato que distorsionan las señales de los radares enemigos
A pesar de dichos adelantos el peligro de un ataque o accidente provocado por un misil sigue latente en especial de aviones comerciales que cuando llegan a ser atacados pueden llegar a ser grandes tragedias